Cada obra es distinta y única. El material que más te convenga para llevar a cabo tu proyecto dependerá mucho de los objetivos que tengas con él, sin embargo, es posible que te encuentres frente a un escenario en el que puedas construir la misma estructura con dos materiales diferentes. 

En este artículo hacemos una comparación entre el concreto y el acero, dos de los materiales más utilizados en la industria de la construcción. Repasamos los pros y los contras de cada uno, esperando que la información aquí expuesta te ayude a tomar una decisión más acertada.

Disponibilidad

Ambos materiales son fáciles de conseguir y tienen una alta disponibilidad en el mercado. Sin embargo, los desastres naturales como sismos e inundaciones, podrían generar escasez de concreto, esto principalmente porque es un material que no se puede reciclar. El acero, por otro lado, se recicla rápidamente en el mercado, haciendo que su nivel de abastecimiento no cambie.

Costo

El concreto es bastante barato gracias a que está hecho de materiales altamente disponibles. El acero, por otra parte, cuenta con una relación fuerza-peso superior al concreto, lo que se traduce en mejor rendimiento; esto ayuda a que, en términos generales, el acero sea más rentable que el concreto.

Fabricación

Cuando de acero y fabricación se trata, este pasa por un proceso muy peculiar. Las estructuras de acero prefabricado suelen ensamblarse lejos del lugar de la obra, para posteriormente trasladarse y facilitar así el ensamblaje final. 

Las estructuras de concreto se forman directamente en el terreno de construcción, se vierte en moldes y posteriormente se deja secar. Al finalizar se remueven los moldes para dejar al descubierto la estructura. El uso de moldes permite conseguir prácticamente cualquier forma que se desee.

Seguridad

Respecto a la resistencia con la que cuentan estos materiales, el concreto es fuerte y pesado, soporta el fuego y explosiones. La desventaja del concreto se encuentra en la poca resistencia que tiene ante la actividad sísmica. Las estructuras de concreto corren el riesgo de caer ante un sismo y ocasionar daños severos.

Por otro lado, es bien sabido que el acero soporta el viento, la lluvia, el moho y otras amenazas naturales. Resiste decentemente al fuego y maneja la actividad sísmica mejor que cualquier otro material, ya que por sí mismo tiene la habilidad de absorber la energía de un terremoto.

Mantenimiento

Las estructuras de concreto requieren mantenimiento permanente contra el moho y la humedad, aunque ayudan a mantener e incluso reducir las temperaturas en interiores. El acero no tiene propiedades aislantes significativas, pero pueden acompañarse de paneles de metal con aislamiento térmico. Respecto al mantenimiento, el acero requiere de este en casos muy específicos. 

En conclusión

El concreto es un material confiable y resistente, ideal para muchos proyectos que además ha sido utilizado en millones de construcciones. No obstante, el acero se destaca en la mayoría de los terrenos como fuerza, flexibilidad, costo, durabilidad y funcionalidad. 

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